Nacido en 1944 en el estado de Misisipi, Fred Smith, forjó su carácter desde temprana edad cuando debió soportar una compleja enfermedad a los huesos; y no es que este padecimiento le hubiera generado un dolor muy grande, sino más bien por la frustración que le provocó el no poder practicar deportes.
A pesar de esto último, la superación de su enfermedad llegó luego. Fred comenzaba a demostrar de que “madera que estaba hecho” cuando con sólo 15 años aprendió a pilotar aviones.
El primer gran hito llegaría tiempo después cuando se matriculó en Yale. Luego de un desacuerdo con un profesor, diseñó un modelo de negocios sobre un servicio de entrega de encomiendas exprés. Sin duda, la mayor virtud de su potencial estrategia, era utilizar aviones en las horas de menor tráfico aéreo.
Tras dejar la idea stand by, Smith ingresó a la Infantería de Marina; un hecho que marcaría fuertemente el destino de su vida y por sobre todas las cosas, su carácter.
Ya de vuelta en Estados Unidos tras dos expediciones, Fred fundó Federal Express en 1971. Las operaciones de Fedex comenzarían dos años más tarde. En sus primeros años de funcionamiento, la empresa acumularía casi US$30 millones en pérdidas, pero la perseverancia y rigurosidad de Smith tendrían frutos: Ya en 1976 FedEx generaba ingresos por más de US$75 millones.
En la actualidad, Smith es uno de los mayores exponentes de la aplicación de estrategias militares hacia los negocios, algo que ha declarado en múltiples ocasiones: «Cuando la gente me pregunta qué principios me han guiado desde que empecé a FedExCorp. años atrás», dice, «mi respuesta a menudo les asusta: Son los principios de liderazgo que aprendí en el Cuerpo de Marines de EE.UU. durante mi servicio en Vietnam.»
Es que para Fred Smith, una de las claves del éxito empresarial y administrativo, es confiar en los gerentes de primer nivel, algo que en las fuerzas armadas vendrían a ser como los suboficiales mayores.
Fuente: Emprende.cl